21.9.10

Para qué mentir.

Era un día cualquiera quizás no lo esperaba. Ni verte marchar de la manera en que lo hiciste...
Dejando caricias derramadas de un quizá, dejando mil lineas de este cuento sin final.
Le he contado al viento que eres especial, que guardo palabras que no olvidare jamás.
Hoy le he dicho al mundo que juntos creamos mil excusas por las cuales ya no nos soñamos.
Persigo tus huellas aunque a veces me haga daño, te daré mis fuerzas aunque desprecies mi mano.
Cuenta cuántas veces has terminado en llanto, resta todas esas que pensaste haber amado.
Todo lo que sube dicen que acaba bajando y es entonces cuando el alma aún reclama los labios.




Aunque me fallaras juro no tenerlo en cuenta,
el corazón perdona en medida de lo que ama.

2 comentarios:

  1. Para qué mentir, no hay nada tan cierto como este texto. Lo mejor que puedes hacer es serte sincera, a ti misma y a los demás, para bien o para mal, el final no importa porque la clave es actuar como sentimos en cada momento, sólo así puedes optar a un final con el que te encuentres satisfecha... ;)

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